9 de enero de 2013

Sonreiré


Halos de luz penetran en el cielo nublado
y la nostalgia intenta tocar a la puerta
trayendo en sus bolsillos preguntas.

Sólo demos un paseo mientras aún no anochece,
cerremos los ojos y olvidemosnos por un momento
de esta tonta racionalidad humana
que siempre cuestiona a la vida
y se aferra a ella tan ilusa y egoísta.

Si hoy amanecí,
si abrí mis  cristales pardos
y contemplé el sol
debería bastarme para ser feliz
Porque aún brillan las estrellas
a pesar de que el cielo
de día las guarde tras su manto azul,
porque el gusto de la vida está
en la simpleza fugaz de una sonrisa efímera,
en una mirada ilusa, en soñador despierto
sin importar cuantos abismos oscuros nos recorran.

Hoy sonreiré por los lirios, por la poesía,
por contemplar el gris cielo que nos rodea
con halos de luz penetrando
entre las tercas nubes
que nos muestran la belleza innegable de la vida.

Volveré a intentarlo


He vuelto a tapar el sol con un dedo,
a caminar sobre las hojas secas que abandonó el otoño
y a pintar con oleos rosa los matices grises
que nos entregaron las piedras en medio del sendero.

No renunciaré al corazón soñador
sólo por haber tomado el trayecto equivocado,
por haberme estrellado con muros resignados.
Retrocederé un par de pasos
y tomaré una nueva avenida,
respiraré profundo y volveré a intentarlo.